María Emilsen y su emprendimiento

 Escrito por Luisa Arango y Estiven Benítez. Grado 11°2

María Emilsen Agudelo Pérez, nacida el 22 de octubre de 1958 en Venecia, Antioquia. Desde muy pequeña su familia ha sido de escasos recursos, por ende, estudio únicamente hasta primaria. Fue criada por sus padres, los cuales tuvieron 4 hijos, de ellos solo viven 3.

María Emilsen ha pasado por el dolor de perder familiares desde muy pequeña, pues cuando tenía tan solo 10 años de edad mataron a uno de sus hermanos llamado Alberto, fue una etapa muy dura para su vida.

Desde pequeña ha vivido en la Comuna 13 pues al poco tiempo de nacer, por temas económicos, tuvo que abandonar su pueblo junto a su familia. Pasó el tiempo y la situación económica en su casa no mejoraba, por eso desde muy joven le ha tocado rebuscarse la vida para salir adelante. Su madre siempre fue una mujer muy enferma por lo cual falleció al poco tiempo de haber llegado a la Comuna.

Siempre ha sido muy cercana a su única hermana llamada Marina, ambas salían de fiesta a una discoteca ubicada en 4 esquinas; a pesar de ser unas hermanas muy unidas eran muy diferentes y por eso eran sus problemas, pues Marina siempre ha sido la más alborotada  le gusta mucho la fiesta y los malos vicios, por el contrario María Emilsen siempre ha sido una mujer familiar, se casó a los 17 años de edad con un hombre llamado José Ignasio Arango con el que tuvo 3 hijos llamados Luis Fernando, Carlos Andrés y Jaime Alonso.

Toda su vida ha sido una mujer guerrera, luchadora y valiente que ha aguantado humillaciones con tal de que sus hijos salieran adelante. Todas las personas la conocen por ser una mujer que siempre está feliz, haciendo lo que le gusta y apasiona que es danzar y cantar.

Sin importar su edad pertenece a dos grupos artísticos que son muy importantes para ella y trata de no faltar a ninguna clase porque es lo que la hace feliz, pero su edad no permite que María Emilsen haga tanto esfuerzo físico, por eso tiene muchas enfermedades en los huesos, sin embargo, para ella no es un impedimento continuar con lo que le apasiona.

Pero ella siempre tuvo un sueño que era tener una tiendita en la sala de su casa, se soñaba detrás de una vitrina atendiendo a sus clientes con el carisma que la caracteriza. En este año, junto a su esposo, cumplió su sueño, ahora, ama lo que hace, siempre recibe sus clientes con una gran sonrisa, con prendas que la caracterizan y con el ánimo de engrandecer su emprendimiento cada día.